Donald Trump, por dar macha atrás a su derrota en las urnas asumió riesgos este sábado en una larga llamada telefónica en la que presionó al secretario de Estado de Georgia, el republicano Brad Raffensperger, para que encontrara los votos suficientes que pongan en riesgo victoria electoral del demócrata Joe Biden.
En una grabación obtenida por The Washington Post, de una hora de duración, el mandatario advierte a Raffensperger de que puede estar cometiendo un delito por no atender a sus demandas. “Solo quiero encontrar 11.780 votos” fueron entre otras la palabras del aun presidente.
La tensión transmitida en la llamada del pasado sábado para cambiar el cómputo para muchos resulta desconcertante y afirman que es una jugada de mucho riesgo. “La gente de Georgia está enfadada, la gente del país está enfadada” refirió el mandatario en un extracto filtrado del audio.
Las aguas no están para nada calmadas en la carrera por seguir en la presidencia por parte de Trump, ademas es evidente que el presidente mueve sus fichas para revertir los resultados electorales, creo que seremos testigos de un final incierto.